Y es tanto nuestro temor que no nos permitimos abrir los ojos, ni menos nuestro corazón. No nos permitimos encantarnos con la vida, ni mucho menos de sentirnos enamorados de alguien. Deja ese temor de lado y dale una oportunidad a amar, a inspirarte, a sentirte vivo nuevamente. A vivir.
Es claro que en la vida siempre habrán altos y bajos; alegrías y tristezas; amores y desamores, pero si vives constantemente con el miedo a sufrir o descubrir algo nuevo, entonces nunca podrás disfrutar de la vida como se debe.
Date una oportunidad. Inspírate. Busca eso que tanto te apasiona y encuentra a esa persona que te haga sentir amor como nunca antes, y te prometo que volverás a sonreír, pero ni siquiera porque esa persona lo haga, sino que porque tú mismo estarás dispuesto a serlo, y ya habrás perdido el miedo a ser vulnerable, habrás perdido el miedo a sufrir.
Incluso, el miedo a vivir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario