Me llama mucho la atención cómo es el proceso de crear algo, desde el sueño inicial hasta las metas propuestas llevadas a cabo. Mientras más claros sean los sueños, más claro estará el camino, más despejado. A veces hay que expandir los sueños, otras veces hay que delinearlos.
El proceso es lo más importante luego del inicio. El proceso puede no tener final, o tenerlo, todo depende de los objetivos y la meta que se tenga.
En este sentido, en la actualidad no se crea tanto, sino que se recrea. Igual esto no tiene porque ser un problema. La originalidad la imprimimos nosotros mismos de acuerdo a nuestra manera de hacer las cosas, nuestra forma, que puede ser más o menos particular.
Así, uno construye su lugar de trabajo, sus labores, su casa, y hasta su habitación y la forma de arreglar su cama.
Es famosa la alquimia que se produce en la cocina, tan famosa a través de la historia, el proceso de “crear”, combinando ingredientes y a través del calor producir la mezcla de los condimentos y como resultado el aspecto, los colores, el sabor, el aroma.
El afán incansable de atrapar una imagen en el tiempo y así quedarnos a contemplarla, es casi como un capricho… la fotografía y esa sugerencia que nos hace, nos guiña el ojo, o nos conmueve.
La música, llegando a ser una debilidad muchos no conciben la vida sin ella, es casi como una droga y tan sugestiva que puede llegar a ser peligrosa.
La escritura y en ella el proceso de crear es para mí o tiene que ser como la música, tiene que transmitir no solo ideas sino que tiene que hacer sentir algo, encender una chispa talves… claro es un ideal como el de la luciérnaga enamorada de la luna, la cual nunca podrá alcanzar… pero se vale y claro, siempre se vale soñar…
En todo nuestro andar existe un proceso de creación… nuestra vida, y ese proceso dura toda la vida.
Para hacer una analogía a veces uno tiene un sueño cuando va creando un blog, y lo va escribiendo, y pone categorías, o “temas que va a desarrollar”, y así va escribiendo.
Por mi parte solo encontré hacerlo de la forma más libre posible, escribo de acuerdo a lo que voy pensando, lo que me inspira, también lo que me preocupa, y aunque parezca mentira, trato de hacerlo la mayoría de las veces de una forma impersonal.
Lo curioso es que los temas han ido creciendo a su antojo, talves de una forma que no planee. Pero creo que eso es lo bueno de este sistema, la capacidad que se tiene para organizar luego el material. Entonces cuando miro las palabras a la derecha veo más o menos los temas en los que me he interesado. Creo que en este sentido es bastante bueno tener un blog. Uno termina conociéndose un poco, dependiendo claro, de la sinceridad que le imprima.
Para mí lo importante es mantenerlo libre, o dejarlo libre, soltarlo… aunque uso categorías trato de no aferrarme a ellas. Para mí el blog es un hobby, y como todo hobby cuando se imponen o se reglamentan horarios o temas, pierde la frescura y la diversión que debe representar para el que lo escribe, y se convierte en una carga. Por mi parte no me amarro a horarios, ni formas, no me gusta la rigidez o la estructura idéntica para todo, en mi caso es así… pues me aburriría terriblemente hacer todo igual. Otra cosa que he aprendido es que si lo disfrutas eso lo vas a transmitir en tus entradas. Por eso, mientras más flexible mejor. No digo que a otras personas no les funcione de otra manera.
Mi marco es el ave volando, ella lo encierra todo…
Hay otros detalles esenciales. Pero se mantienen así, sin mucha complicación. Son más bien nortes, referentes, o guías… Son la composición básica sin la cual lo demás no tendría punto de inicio, ni el proceso tendría un camino…
En total lo que quiero decir es que a veces definimos los proyectos y en el camino ellos van tomando su propia forma y hasta nos guían, y también nos describen, nos ayudan y mucho.
En fin, también es bueno tener siempre en cuenta que un proyecto refleja apenas un aspecto de nuestra personalidad, que puede ser una pincelada nada más, eso depende de la energía que le entreguemos. Y también de acuerdo a como se va desenvolviendo un proyecto, uno tiene el poder de reorientarlo, o dejarlo así…
domingo, 6 de diciembre de 2015
Cuando no quede nada…?, Espera.
-¿Cuando no queda nada que se puede hacer?.
-Volver a comenzar. Pero no de la misma manera, no otra vez igual. Porque ya sabes que no será igual. Con todo despedazado. Talves puedas hacer otra cosa, diferente, si es que quieres hacer algo.
-Pero sabes que no tengo ganas, ni fuerzas. Para mí todo ha acabado, solo queda un desierto hostil, donde antes había flores… y la amargura que crece con rabia…
-Me preocupa tu estado.
-No quiero forzar un comienzo. Siento que es artificial. Como poner una bomba de aire a un moribundo. No quiero. Prefiero seguir por donde voy y arrastrarme en mi tierra y darme cuenta que no hay nada. Es más quisiera solamente arrancarme cualquier raíz que por dentro quiera revivir… tengo miedo…
– Siempre da miedo amar.
-Pero parece que tú no comprendes nada.
-Te comprendo, mucho más allá de lo que crees. Te comprendo porque estuve en tu lugar. Ame, y ame hasta cuando no querían ni saber de mi. Y dolió. Dolió hasta la muerte. ¿Y no es eso el amor, un sacrificio que solo es tal si llevas tu cara bien limpia y lavada, y tu ser perfumado, tanto, que nadie nota ese dolor que por dentro apaga cualquier rebeldía… Nadie que no haya amado entiende esto.
-Pero yo no tengo la fuerza que tienes tu. Soy tan débil… estoy tan destruido… y soy tan pequeño… soy como un niño golpeado, despreciado en lo más hondo de su ser por quien debió protegerlo…
-Querido… que podría yo decirte que te calme?. Solo deja que te abrace, no apartes mis brazos, espera conmigo a que el sol amanezca. Por favor no te vayas, espera, me quedaré aquí contigo, no estás solo, espera. No arranques de tu ser lo hermoso que queda… no lo hagas por favor… Sé que tu no crees en Dios, pero Él fue quien me dio las fuerzas cuando pase por ese desierto amargo que ahora cruzas tu. Cuando quise acabar con todo, porque era más fácil terminar que soportar… Él me sostuvo. Él me mostró quién era Él, quien es Él, el único que puede “abrir caminos en el desierto y ríos en la soledad”.
-Quisiera tener eso que tienes tu.
-Lo tendrás. Lo sé. El amor, el camino correcto, es un camino que puede ser muy doloroso y difícil, pero si no renuncias a mantener esa chispa que enciende otra vez tu corazón, vivirás. Suena paradójico, pero ese pequeño retoño que se niega a morir y al que le tienes miedo porque crees que te hará sufrir de nuevo, es la vida de tu corazón, al final lo único que importa es que puedas sentir y ser sensible a la voz que te habla desde adentro, no lo dejes morir…, aunque te digo, si muere, no llorarás, pero tampoco reirás, ni siquiera te darás cuenta de nada. Y no es eso como estar muerto?. Pero estar vivo y amar de verdad quizá sea puro llorar por dentro y por momentos ver la luz… o talves como dice la canción “el amor es un frío y roto Halleluyah”. Pero no te cierres… espera. Deja que te abrace hasta que amanezca…
La depresión
Estar molesto con la vida, por como pasaron las cosas, por no poder hacer nada, o peor aún, por haberlo hecho todo y darte cuenta que no importaba… que hagas lo que hagas todo seguirá igual, que tu aporte es tan pequeño, que todas tus fuerzas son menos que nada… perder la esperanza y con ella el valor… nada vale nada pero sobre todo tu.
Escuchar y escuchar que no se entiende tu situación, pues qué te falta? si la vida todo te lo da con creces, y sentirte ahora también un malagradecido incapaz de mirar lo que todos ven…
Quisiera tanto ver, sentir, estoy de plástico, de papel…
Qué paso, en qué momento todo se fue derrumbando?. Lo recuerdas bien, fue en ese instante preciso que sentiste que tenias que dar mucho, mucho más y que era tu responsabilidad, para luego darte cuenta que cometiste un tremendo error de cálculo, tu aporte más grande siempre seria escaso.
Terrible lección de humildad… necesaria siempre, pero tan dolorosa…, te corta todas las ramas, las flores, los sueños, los anhelos… quien soy sin mis sueños?
Que dolor tenerse que levantar… cualquier mínimo esfuerzo exige una enorme fuerza de voluntad que se fue con el anochecer… solo queda una mínima sombra de un tronco pequeño tan insignificante…, capaz de ser pisoteado por todo el que pasa… el dolor es lo único que cobra cada vez más espacio y altura, se hace tan grande, se vuelve físico, aparece delante de ti y ahora lo puedes tocar con las manos, todo duele… el pensamiento se nubla…
Para que leer a este tipo, que sabe él? para que ir a un doctor si ni un amigo te puede comprender, para que ver la tv, es tan efímera. Sin hambre de nada, sin sed. No me hables, no comprendo nada de lo que me dices, ni quiero tratar, no quiero pensar… solo quiero dormir. Mi mente esta tan cansada….
No quiero que nadie me vea así, no quiero lastima de mí. Estoy molesto por como todo pasa, no puedo perdonar, no puedo olvidar… los pensamientos se repiten una y otra vez, me quieren enloquecer. Quisiera, quisiera correr, quisiera escapar…, ojala fuera esa ave que tanto ame…, para volar lejos, lejos…
Escuchar y escuchar que no se entiende tu situación, pues qué te falta? si la vida todo te lo da con creces, y sentirte ahora también un malagradecido incapaz de mirar lo que todos ven…
Quisiera tanto ver, sentir, estoy de plástico, de papel…
Qué paso, en qué momento todo se fue derrumbando?. Lo recuerdas bien, fue en ese instante preciso que sentiste que tenias que dar mucho, mucho más y que era tu responsabilidad, para luego darte cuenta que cometiste un tremendo error de cálculo, tu aporte más grande siempre seria escaso.
Terrible lección de humildad… necesaria siempre, pero tan dolorosa…, te corta todas las ramas, las flores, los sueños, los anhelos… quien soy sin mis sueños?
Que dolor tenerse que levantar… cualquier mínimo esfuerzo exige una enorme fuerza de voluntad que se fue con el anochecer… solo queda una mínima sombra de un tronco pequeño tan insignificante…, capaz de ser pisoteado por todo el que pasa… el dolor es lo único que cobra cada vez más espacio y altura, se hace tan grande, se vuelve físico, aparece delante de ti y ahora lo puedes tocar con las manos, todo duele… el pensamiento se nubla…
Para que leer a este tipo, que sabe él? para que ir a un doctor si ni un amigo te puede comprender, para que ver la tv, es tan efímera. Sin hambre de nada, sin sed. No me hables, no comprendo nada de lo que me dices, ni quiero tratar, no quiero pensar… solo quiero dormir. Mi mente esta tan cansada….
No quiero que nadie me vea así, no quiero lastima de mí. Estoy molesto por como todo pasa, no puedo perdonar, no puedo olvidar… los pensamientos se repiten una y otra vez, me quieren enloquecer. Quisiera, quisiera correr, quisiera escapar…, ojala fuera esa ave que tanto ame…, para volar lejos, lejos…
A veces, sólo un segundo…
Cuando se disfruta poco de los días… se añora lo bueno o lo recordado, y se tiende a engrandecer… sin embargo eso grande puede ser tan solo un detalle delicado que se ha quedado. Es lo que expresa aquel famoso dialogo de Alicia en el país de las maravillas:
“Alicia: ¿Cuánto tiempo es para siempre? Conejo blanco: A veces, sólo un segundo.”
Pero el tiempo sigue su curso sin detenerse, y nos va arrastrando con el a nuevas realidades, ¿queridas? no, muchas veces no, a veces tan solo por ser nuevas. Aferrándose a repetir un pasado irremediablemente dejado atrás, nunca lo nuevo será igual. A veces ni mejor ni peor sino tan solo diferente. A veces se deforma al compararse y se tiñe como de amarillo, pierde la frescura… en ocasiones solo falta la ayuda de alguien sin pasado que nos haga reír y atrape ese instante… y nos traiga de vuelta.
“Alicia: ¿Cuánto tiempo es para siempre? Conejo blanco: A veces, sólo un segundo.”
Pero el tiempo sigue su curso sin detenerse, y nos va arrastrando con el a nuevas realidades, ¿queridas? no, muchas veces no, a veces tan solo por ser nuevas. Aferrándose a repetir un pasado irremediablemente dejado atrás, nunca lo nuevo será igual. A veces ni mejor ni peor sino tan solo diferente. A veces se deforma al compararse y se tiñe como de amarillo, pierde la frescura… en ocasiones solo falta la ayuda de alguien sin pasado que nos haga reír y atrape ese instante… y nos traiga de vuelta.
domingo, 29 de noviembre de 2015
¿Cierto?
Y justo cuando tratas de dormir una tormenta de pensamientos nublan tu mente, se poseen de ella y te hacen pensar, pensar en todo lo que pasa y cómo es que llegas a estar ahí, echado; y todo se torna confuso, incierto. Tus preguntas no tienen respuestas claras, tus pensamientos surgen indeterminados, sientes que la noche te pesa, como si fuera una lucha en la lluvia de tus pensamientos y solo te puedes librar cuando pegas los ojos. Entonces emerge una vez una ascua, sientes que una parte de ti arde, que poco a poco se adhiere a todo de ti, todo en un intenso deseo, que aun así las respuestas no sean concretas ni claras, siempre habrá una sumarísima, siempre tendrás ese pensamiento favorito, y siempre habrá una; una decisión que tomarás por mucho que te equivoques, tus razones son efímeras cuando llegas a tus conclusiones, tu mente se desborda cuando quieres pensar en algo que sientes más que razonas..
Y todo se trata de una persona.
Mi peor enemigo
Quisiera algunas veces que me saquen de mis pensamientos, que mi razón y mis sentimientos se sujeten como uno solo. Quisiera que mi ''yo'' interior me deje en paz, que deje de atormentarme. Soy yo mismo mi peor enemigo, que quiere comprender la vida en vez de vivirla. Siento que cada vez que doy un paso resbalo dos, que siempre me mantengo en un circulo vicioso en mi mente. Que cada vez que paso por aquel lugar donde solía entrar en un mundo de cuatro paredes siento como un punzón en mi pecho. Siento como yo mismo pido a gritos a mi mismo, porque me extraño.
Todo es confuso, nunca he sentido rencor hacia nadie, pero ahora siento rencor hacia mí y no lo malinterpreten, no estoy deprimido, ni me odio todo el tiempo, es solo que aveces no concuerdo con mis pensamientos, que no siempre cavilan lo que quiero, como si ellos estuvieran vivos dentro de mí y salen de mi mente. Y es entonces cuando me molesto sin saber por qué, o mejor dicho sabiendo el por qué pero sin controlar mi molestia. Sé que para algunos se les hará difícil comprenderme pero al menos espero no ser la única.
En busca de una respuesta
Y de pronto lanzas la pregunta,como el que lanza una piedra con miedo a herir a alguien (o herirse a si mismo). Y esperas,esperas y esperas con ansia la respuesta,una respuesta que en el fondo no quieres leer (o si) pero que por mazoca y tonta la esperas. Hasta que llegas,y la lees,y todo lo que pensabas minutos antes,vuela de tu cabeza y te quedas en blanco. A veces,no somos conscientes del dolor que pueden tener las respuestas,o peor,del dolor que puede tener la pregunta que lancemos. Durante toda la vida nos comportamos así,lanzamos las cosas al aire para que los demás lo cojan o respondan como nosotros queremos sin importarnos que sienten los demás. Es eso,como la piedra que tiramos a veces enfadados y que sin querer le damos a alguien,o rebota y nos da a nosotros mismo haciéndonos daño,la vida creo que es así,tu lanzas tus cosas,tus miedos,tus inseguridades,el dolor y ella sola se encarga de devolvértelo a ti,de lanzadlo contra ti...como un boomerang,como las ráfagas de aire que van y vienen.
lunes, 23 de noviembre de 2015
Autocritica
"No hay que llorar, guarda las formas. Tienes que ser valiente", y te lo crees. Coges aire. Respiras. Sonríes. Una y otra vez. Lo que no ves, lo que nadie ve, es que las heridas se enquistan por dentro. Que las lágrimas se agrupan formando charcos de sangre. Que duele aunque no lo llames dolor porque te prohiben ponerle nombre a ese vacío. "Tienes que expresar tus emociones", te dicen. Porque para ser persona hay que sentir. Maldita sociedad de mierda, maldito caos, ¿en qué quedamos? Y entonces te das cuenta de que habrá siempre más de mil señales indicándote caminos diferentes. Y dejas de escuchar a los demás para escucharte a ti mismo. Me pregunto cuántas personas pierden la felicidad guardando las formas. Respiras - otra vez - antes de saltar al vacío. A vivir se aprende viviendo. Pero por mucho tiempo que pase, a veces, sigues cayendo. Y te sigue acojonando levantarte. No me hagáis ilusionarme pensando que volveré a tener algo si no será así. Yo que sé. Quizás he sobreestimado mi fuerza, una vez más, y ni siquiera me atreva a pedirle a nadie que me preste un poco. Pensaba que podía llevar la situación con normalidad. Ni siquiera me importaba tener que sostenerte la mirada como diciendo "Mírame, no me has quitado nada, mírame las veces que quieras, que nada me puede desmontar. Soy de hierro, ¿ves? o de hielo, que es parecido". Pero siempre tiene que haber alguien que me recuerde que en toda guerra hay heridas y que ser pistola significa ocasionar daños. "-Siempre lo destrozas todo", "¡Cállate! Tú no has destrozado nada, no te preocupes, no podías evitarlo..." "Y una mierda, fuiste débil, podías haber aguantado..." y explotas. Y vuelves a llorar como las primeras veces. Y odias las putas fiestas de mierda. Y dices puta y mierda, porque así parece que lo sacas fuera. Y escribes, porque escribir es otra forma de sangrar, pero más sana. Y te dices a ti misma "Yo también tengo derecho a ser una niña asustada alguna vez". Pero no te lo crees.
domingo, 15 de noviembre de 2015
Ella
Ella tiene tanto miedo de ser como es de verdad, que juega a ser alguien mas. No le ha dicho a casi nadie que tiene cicatrices o que daria lo que fuera por un viaje a un sitio de esos donde todo es campo. Ella no sabe pedir abrazos, suele robarlos. No le gusta que la miren fijamente porque se pone tan nerviosa que entonces no le salen las palabras. Por eso mismo lleva pulseras, para desviar la atencion. Ella tiene la sensacion de que el mundo esta loco y que cada vez hay menos personas que valen la pena. Ella tiene ganas de que sea verano y de ponerse al sol todos los dias. Ella es celosa, le gustan los perros y ojala se la tragara la tierra en algunos momentos. Ella tararea canciones en silencio y si, alguna vez esta triste, se le nota demasiado. Ella a veces se siente un bicho raro. Ella tiene miedo de querer porque nunca ha dejado de hacerlo con nadie, es uno de los motivos por el que coge cariño tan rapido. Ella sonrie a la vez que llora porque una vez prometio ser feliz. Ella ha intentado quitar de su vida a gente que le ha hecho daño. Ella todavia no ha conocido a nadie perfecto. Ella se ha sentido mal y a querido mandarlo todo a la mierda cientos de veces, pero ha vivido tantas cosas y quiere vivir otras cuantas que eso le parecio insignificante. Ella aprendio a diferenciar el amor de la amistad un dia cualquiera. Ella solo echa y ha echado de menos a una persona porque sabe jamas podra volver a verla. Ella se esta enamorando y no quiere.
Yo
Soy orgullosa y me callo muchas cosas que me gustaria decir. No me gustab las peliculas de risa facil y no soporto a las personas hipocritas. Me trago demasiadas palabras de las que escuecen y luego no puedo evitar esa explosion tipica de los que solemos acumular de todo aquello que no puede contenerse. Cojo cariño facilmente a las personas aunque ni lo diga, ni lo demuestre demasiado. Tengo una forma especial de demostrar que me importa la gente. Amo los pequeños detalles de la vida. Soy muy perezosa e inestable, me da rabia que me hagan callar. Cambio de humor diez veces al dia. Me podras encontrar soñando despierta en mi habitacion con mi musica sonando y mi mente en otra parte. Me encanta pasar buenos ratos con la gente y volver a casa con cara de loca, pero sobre todo lo que mas me gusta es la gente que me sonrie y me quiere tal y como soy con mis mas y mis menos que me apoyan en todo momento y que dan la vida por mi.
Vive
Vive cada instante de la vida, es mas disfrutala como puedas,
y olvidate de aquellos fallos o equivocaciones del pasado,
porque al final de las unicas cosas que reordaras
va a ser de las cosas buenas,
y no te preocupes por tonterias,
que mira que las ahi...
y olvidate de aquellos fallos o equivocaciones del pasado,
porque al final de las unicas cosas que reordaras
va a ser de las cosas buenas,
y no te preocupes por tonterias,
que mira que las ahi...
Lo que nunca te voy a decir...
Nunca te voy a decir que me pongo nerviosa cuando te miro. Que mis nervios, bloqueados como una caja fuerte, sólo son capaces de mandarme impulsos hacia el roce con tu cuerpo. Intentando buscar ese choque con tu sonrisa sincera, tus anécdotas inconfesables, tus historias melodramáticas y, por qué no, también con tus sueños y pasiones.
Nunca te diré que me gustas tanto como los domingos en pijama, un buen clásico de la literatura, un café caliente al despertar cuando ya es invierno e, incluso, más que una tarde de lluvia escuchando música, mientras el agua se aglutina en los cristales.
Nunca te voy a decir que siempre me ha gustado arriesgar, todo o nada; apostar con los ojos cerrados sin saber qué cartas puedo jugar. Soy de impulsos, tentaciones y riesgos. No temo al fracaso, ni a perder lo que he ganado. Sólo tengo miedo a las dudas, confusiones y al caos. Me asusta esa inseguridad de las personas de no saber qué hacer, dónde ir o por dónde caminar…. Pero eso tú no lo sabes, porque nunca te lo voy a decir.
Jamás te diré que al contemplar tus ojos me invade una sensación de tranquilidad que añoro. Ojalá pudiese perderme en tu mirada días y noches, naufragar sin miedo a que el mar me arrolle de tus pupilas. Son capaces de iluminar la noche más oscura; como esos faros que están en alta mar, destellando en el horizonte, y consiguiendo, sin apenas esfuerzo, rescatar a las sirenas que están ahogándose en las tinieblas.
Nunca te contaré que mi mirada se pierde en tu cuerpo, te busca y, aunque no te encuentre, intenta cruzarse con tus ojos para poder sonreír y, así, jamás volver a ser indiferente.
Sobre todo, lo que nunca te voy a decir es que quiero compartir contigo charlas interminables, cervezas frías en un bar mientras la nieve cae invadiendo la calzada, visitas inesperadas, conversaciones nocturnas que no permiten conciliar el sueño, llamadas sorpresivas, sueños y planes, noches de insomnio y mañanas en la cama, prisas, sonrisas, miradas, abrazos, palabras, emociones….
Jamás sabrás lo que nunca te voy a decir; aunque ya te lo he dicho.
sábado, 14 de noviembre de 2015
Una lagrima
Una lágrima resbala
por mi rostro
el miedo se apodera de mi
siento angustia en mi alma
dolor en el corazón.
Una lágrima cubre mis ojos
como la lluvia al resbalar por el cristal
gota tras gota caen sin cesar
y siento temor que la lluvia no cese
que nadie me salve de ese dolor
grito en silencio, silencio mudo
nadie lo oye y siento amargura
Una lagrima que sigue hay
mojándome sin parar
dolor, angustia, miedo
siente mi cuerpo sin cesar
Espero que pase, como el invierno
que se lleve el viento helado
para dejar de temblar
y ver el mundo de color
Una lagrima sigue hay
Pero estas tú intentando
secarla, intentando sacarme
esa sonrisa que tanto necesito,
apartar esas lagrimas que caen
sin parar, escuchando mis susurros
entrecortados, ahora entiendo
a dios que nos manda un ángel
ese es mi consuelo que a mí ya me llego
por lo menos mis penas son menos
al estar tu, ese amigo llamado ángel
Gracias.
Miedos y sentimientos
Me asusta. Me asusta querer de nuevo.
Quererle.
Ilusionarme y que más tarde me haga añicos.
De sentir. De que escalofríos me recorran las espalda cuando piense en él.
Miedo de decir las palabras equivocadas en el momento menos oportuno y perderlo para siempre.
Miedo a decir que me estás enamorando.
Y lo se, porque soy incapaz de enfadarme contigo.
Y soy capaz de odiarte, de esa manera en la que sólo se odia a la gente que poco a poco te ha ido GANANDO.
Quererle.
Ilusionarme y que más tarde me haga añicos.
De sentir. De que escalofríos me recorran las espalda cuando piense en él.
Miedo de decir las palabras equivocadas en el momento menos oportuno y perderlo para siempre.
Miedo a decir que me estás enamorando.
Y lo se, porque soy incapaz de enfadarme contigo.
Y soy capaz de odiarte, de esa manera en la que sólo se odia a la gente que poco a poco te ha ido GANANDO.
De esas maneras
¿Me gustas sabes? Me gustas mucho.
De esa manera en que puedo ver que te voy a llegar querer tarde o temprano.
De esa manera en la cual solo quiero cuidarte.
De la manera en que sé que por las noches no dormiría por verte a ti dormir.
Y que me quitaría todas mis sonrisas para dartelas a ti y que sonrías. Que tienes una sonrisa preciosa.
De la manera en que cada abrazo que te doy te haga olvidarte un poquito del resto del mundo.
De esa manera en la cual solo quiero cuidarte.
De la manera en que sé que por las noches no dormiría por verte a ti dormir.
Y que me quitaría todas mis sonrisas para dartelas a ti y que sonrías. Que tienes una sonrisa preciosa.
De la manera en que cada abrazo que te doy te haga olvidarte un poquito del resto del mundo.
Y es que eso es lo que me sobra, el resto del mundo si tú estas conmigo.
Y quizás sea muy precipitado decirte todo eso.
Pero es así. Y espero algún día quererte, tanto que incluso duela.
Es por ti
¡Es por ti, que vuelvo a nacer!
mi piel marchita, se siente florecer
vuelo entre nubes de algodón
sintiendo cada latido de mi corazón.
¡Es por ti, que vuelvo a sonreír1
tome aquella vieja libreta
que guardaba en una gaveta
y de nuevo quise escribir...
¡Es por ti, que me he vuelto poeta!
con hilos de plata borde tu silueta,
y tatué en tu cuerpo los mas bellos versos
recordando tus brazos, tus manos, tus besos
¡Es por ti, que hoy descubrí!
que la luna es de queso
que la estrella un reflejo
de este amor, que hoy siento por ti.
¡Es por ti, que vuelvo a creer!
en la magia de la estrella fugaz
a la cual le pedí en silencio
de nuevo en tus brazos estar.
¡¡Es por ti, que hoy quiero de nuevo vivir!!
¡¡Es por ti, que hoy quiero de nuevo vivir!!
miércoles, 4 de noviembre de 2015
Cuando no quede nada…?, Espera.
-¿Cuando no queda nada que se puede hacer?.
-Volver a comenzar. Pero no de la misma manera, no otra vez igual. Porque ya sabes que no será igual. Con todo despedazado. Tal ves puedas hacer otra cosa, diferente, si es que quieres hacer algo.
-Pero sabes que no tengo ganas, ni fuerzas. Para mí todo ha acabado, solo queda un desierto hostil, donde antes había flores… y la amargura que crece con rabia…
-Me preocupa tu estado.
-No quiero forzar un comienzo. Siento que es artificial. Como poner una bomba de aire a un moribundo. No quiero. Prefiero seguir por donde voy y arrastrarme en mi tierra y darme cuenta que no hay nada. Es más quisiera solamente arrancarme cualquier raíz que por dentro quiera revivir… tengo miedo…
– Siempre da miedo amar.
-Pero parece que tú no comprendes nada.
-Te comprendo, mucho más allá de lo que crees. Te comprendo porque estuve en tu lugar. Ame, y ame hasta cuando no querían ni saber de mi. Y dolió. Dolió hasta la muerte. ¿Y no es eso el amor, un sacrificio que solo es tal si llevas tu cara bien limpia y lavada, y tu ser perfumado, tanto, que nadie nota ese dolor que por dentro apaga cualquier rebeldía… Nadie que no haya amado entiende esto.
-Pero yo no tengo la fuerza que tienes tu. Soy tan débil… estoy tan destruido… y soy tan pequeño… soy como un niño golpeado, despreciado en lo más hondo de su ser por quien debió protegerlo…
-Querido… que podría yo decirte que te calme?. Solo deja que te abrace, no apartes mis brazos, espera conmigo a que el sol amanezca. Por favor no te vayas, espera, me quedaré aquí contigo, no estás solo, espera. No arranques de tu ser lo hermoso que queda… no lo hagas por favor… Sé que tu no crees en Dios, pero Él fue quien me dio las fuerzas cuando pase por ese desierto amargo que ahora cruzas tu. Cuando quise acabar con todo, porque era más fácil terminar que soportar… Él me sostuvo. Él me mostró quién era Él, quien es Él, el único que puede “abrir caminos en el desierto y ríos en la soledad”.
-Quisiera tener eso que tienes tu.
-Lo tendrás. Lo sé. El amor, el camino correcto, es un camino que puede ser muy doloroso y difícil, pero si no renuncias a mantener esa chispa que enciende otra vez tu corazón, vivirás. Suena paradójico, pero ese pequeño retoño que se niega a morir y al que le tienes miedo porque crees que te hará sufrir de nuevo, es la vida de tu corazón, al final lo único que importa es que puedas sentir y ser sensible a la voz que te habla desde adentro, no lo dejes morir…, aunque te digo, si muere, no llorarás, pero tampoco reirás, ni siquiera te darás cuenta de nada. Y no es eso como estar muerto?. Pero estar vivo y amar de verdad quizá sea puro llorar por dentro y por momentos ver la luz… o tal ves como dice la canción “el amor es un frío y roto Halleluyah”. Pero no te cierres… espera. Deja que te abrace hasta que amanezca…
Escribir para mi...
Que falta me hace escribir, parece que después de la sequia siempre llega la lluvia, a veces triste, a veces alegre, otras en formas difíciles de describir. Estos días sin escribir me han mostrado algunas cosas muy importantes y que no había visto, por ejemplo que el hecho de plasmar ideas ha sido el contacto más cercano que he tenido con la belleza a modo interno, personal, de expresión, la vía de escape a la sensibilidad difícil de expresar, de contener, que a veces fluye en lagrimas, otras en palabras, se tergiversa en reclamos a la gente, a la vida, a las situaciones que tanto me afectan a nivel personal y de mi país, este que tanto amo…
La vida es dura y unos días más que otros, escribir para mi suaviza esa dureza que encuentro afuera y también en mi… o no sé si al contrario me imagino que escribiendo voy suavizando los callos que encuentro en mi y allá afuera…
Realmente hay tanta belleza que se me pierde si no la expreso… como el que con una linda tonada al quedarse callado, al no poder hablar se amarga, se marchita…
Todo y creo que todo mundo o la mayoría esta sediento del buen hacer, de las buenas maneras, la atención, de poder sentir todo aquello que lo afecta, así como la lluvia que cae se siente encima, en la piel. Siempre he pensado que el peor estado es ese en el que no se puede sentir nada, pero he descubierto otro, aquel estado básico de solo comer para vivir olvidando todo lo demás, todo lo que representa por ejemplo un árbol gigante, una flor… los pájaros que cantan a su alrededor, sin esto que somos? que soy?
Necesito algo más que pan para vivir…, necesito la música del viento, a veces caliente y otras frío, pero que es la vida sino todo esto, toda ella completa… qué es…
La vida es dura y unos días más que otros, escribir para mi suaviza esa dureza que encuentro afuera y también en mi… o no sé si al contrario me imagino que escribiendo voy suavizando los callos que encuentro en mi y allá afuera…
Realmente hay tanta belleza que se me pierde si no la expreso… como el que con una linda tonada al quedarse callado, al no poder hablar se amarga, se marchita…
Todo y creo que todo mundo o la mayoría esta sediento del buen hacer, de las buenas maneras, la atención, de poder sentir todo aquello que lo afecta, así como la lluvia que cae se siente encima, en la piel. Siempre he pensado que el peor estado es ese en el que no se puede sentir nada, pero he descubierto otro, aquel estado básico de solo comer para vivir olvidando todo lo demás, todo lo que representa por ejemplo un árbol gigante, una flor… los pájaros que cantan a su alrededor, sin esto que somos? que soy?
Necesito algo más que pan para vivir…, necesito la música del viento, a veces caliente y otras frío, pero que es la vida sino todo esto, toda ella completa… qué es…
Ella
He perdido tantas cosas por ella...
¡Por esta maldita enemiga!
He llorado más veces de las que he reído,
me he estremecido de soledad rodeada de gente.
Abrazada a la melancolía, ella me consuela y me susurra que nada es para siempre.
Con sus heladas manos me ayuda a saltar al vacío,
me hace creer que yo soy sólo suya y de nadie más.
Consume mi vida y agota mis ganas.
Me inocula veneno con tintes de irracionalidad.
Me ayuda a morir, cuando lo único que quiero es escapar.
El ángel que quise ser
La imbécil.
La condenada.
La que cae siempre con la misma piedra.
La que va contemplar estrellas a ninguna parte.
La que juraba que no iba a dejar que su corazón se desbocara.
Sola, recluida en el silencio, y gritando al eco de las esquinas vacías de su mente.
La que quiso morir de risa
y se estremeció al descubrir que de su corazón sólo podían salían lamentos.
La del corazón vacío.
La del corazón maldito.
Aquella de alma negra y alas quebradas.
El ángel que quise ser.
El ángel caído que soy.
La condenada.
La que cae siempre con la misma piedra.
La que va contemplar estrellas a ninguna parte.
La que juraba que no iba a dejar que su corazón se desbocara.
Sola, recluida en el silencio, y gritando al eco de las esquinas vacías de su mente.
La que quiso morir de risa
y se estremeció al descubrir que de su corazón sólo podían salían lamentos.
La del corazón vacío.
La del corazón maldito.
Aquella de alma negra y alas quebradas.
El ángel que quise ser.
El ángel caído que soy.
martes, 22 de septiembre de 2015
La película de nuestra vida
Todo pasa y seguirá pasando, no podemos tener el control sobre ello, solo podemos mirar.
La vida es un constante desafío. Cada uno de nosotros escribimos nuestro propio guión y dirigimos nuestra propia película. Una película donde todo lo que sucede fue por alguna causa; una decisión, la misma que nosotros hemos elegido.
La vida es una constante seguidilla de decisiones, una rutina donde tenemos que elegir estas mismas y a veces no hacen más que, en lugar de acercarnos a la meta, aumentar el número de desafíos a vivir.
Nos enamoramos. Sentimos ese cosquilleo interno. Creamos una historia -que probablemente no está escrita en ningún lugar- cada noche antes de dormir o esas madrugadas cuando despiertas y por más intento de volver a dormir, solo terminas imaginándote una historia con esa persona que te hace latir el corazón, con esa persona que te hace sonreír hasta con un mensaje. Rompiendo cualquier límite, hasta la misma distancia.
No toda película estará proyectada una eternidad en los cines, o aún, los cineastas no dirigirán una que tenga duración infinita. En cualquier momento el final llegará. La pantalla dejará de proyectar. El telón se cerrará.
El amor que había nacido cuando nos enamoramos se habrá acabado. No importa por qué ni como, menos aún donde se fue, no hay otra opción más que aceptar y por más intento que hagas en recuperar, en tratar de volver reescribir, la historia habrá llegado a su fin
No habíamos imaginado lo que pudiera pasar. Es difícil – por lo menos para quienes hemos amado de verdad- aceptar que las historias que imaginamos cada noche y esas madrugadas no podrán vivirse. Es difícil aceptar que será otra persona que recibirá los besos que eran tuyos, esos abrazos que eran para ti.
Es injusto que esa persona se vaya dejándote un vacío, que se lleve parte de vida, tu alegría, tus sonrisas y que te deje solos los recuerdos que te martirizarán, pero nadie dijo que la vida tenía que ser justo. Y duele porque quieres de verdad.
Y por más que te cueste entender, verás que se ha terminado. Solo terminamos siendo dos personas que se quisieron demasiado. Que vivimos nuestra propia historia. Que nos hicimos feliz. No importa que la película haya sido corta, que la felicidad haya sido temporal, era nuestra y eso nadie lo cambiará.
No importa que nuestro para siempre solo haya sido temporal, fueron horas, meses eternas. Y por más que haya durado solo poco más de un año, fue nuestra.
No importa cuántas veces que se haya cerrado el telón, siempre volverá abrirse. Quizás ya no para repetir la misma historia, pero sí para dar inicio a otra, donde probablemente no tenga los mismos actores, pero que cambiará tu vida, que te hará crecer como persona, que te hará madurar y entender con más claridad.
Por más veces que las historias se acaben no serán las únicas por escribirse en tu vida. Siempre habrá una que se esté iniciando. Siempre habrá una película que se esté iniciando a dirigir.
Siempre habrá en alguna parte una persona que esté dispuesta a escucharte, a amarte, a curar las heridas de tu corazón, a darte unos besos y abrazos que te harán vivir, que te harán soñar despierto, que te harán feliz.
jueves, 17 de septiembre de 2015
ESTA VEZ NUESTRO ADIÓS ES DEFINITIVO, QUERIDO AMIGO
Hace
mucho que tengo esta certeza, pero esta es la primera vez que me atrevo a
hablar.
A
ti, mi querido amigo… o que antes lo eras.
Hoy
sé que no puedo contar contigo, porque atreverme a hacerlo, me haría más daño
del que me causa el silencio. Pedirte ayuda sería peor que la indiferencia que
hoy existe entre nosotros.
Me
pregunto si mi corazón tiene una parte rota. Me pregunto si no soy demasiado
dura, pero no puedo aceptar lo que ha pasado entre nosotros, mientras que tú…
dudo que siquiera haya pasado por tu mente el pensarlo. Sigues ignorante en el
mundo que te inventas, en el mundo que tú creas y en el que piensas que todo
está correcto.
Ese mundo en el que vas a recibir las compensaciones que ansías,
por las que luchas. Pero todo eso es falso, y ambos lo sabemos.
El
precio que pagarás por volver real ese mundo de fantasía, será tu inocencia.
Y
por eso tú ya no tienes tiempo para llorar conmigo, para que hablemos sin
distracciones y yo no me siento tu amiga ya. Pienso que lo fui, pero tal vez
esa venda que tienes no te lo dejo ver. Te digo adiós porque es necesario, y
aunque me duela lo dire: tú y yo, ya no somos nada.
Esta
amistad que significó tanto para mí, hoy ya no existe, ¿cómo llegamos a
esto? Tal vez me equivoqué al tratar de
decirte las cosas como eran. Tal vez fue mi total sinceridad ante todo; o tal
vez fue que no supe quedarme callada cuando veía que lo que hacías o decías
estaba mal. Pero eso es lo que hacen los amigos de verdad.
Quizás
mi mayor error fue eso, considerar que era tu amiga, tomarme ese espacio en tu
vida. Me metí en ese papel pensado pensando que sabrías tomarle el peso a ese
compromiso, pero no. No creo que llegue nunca a acostumbrarme a tu ausencia,
pero sé que es lo mejor.
Tal
vez las palabras que salieron de nuestras bocas fueron errores que nunca
debimos cometer, pero simplemente se escaparon. Jamas pensé que fuera de esta
manera como todo terminaría entre nosotros. No pensé que iba a terminar en
verdad. Había tantos planes para futuro y, en menos de tres minutos, todo
acabó.
DÉJAME EXPLICARTE, QUE ME CANSÉ DE PERSEGUIR SUEÑOS ROTOS
Y aquí estoy, poniendo
un punto final, y preparándome para un nuevo inicio. En una etapa donde cierro
un capítulo que ya no hace más que doler. Durante mucho tiempo me encerré en mi
mundo, en nuestro mundo; donde yo era tu princesa y tus errores, donde
aprendías poco a poco a quererme mejor.
Quiero contarte que tú
eres el hombre que al abrazarme me hacía sentir la mujer más protegida, cuando
me mirabas en busca de una sonrisa sentía una paz que antes no conocía y cuando
me suspirabas al oído un “Tu eres la única” surgía de alguna remota parte de mi
cuerpo una inmensa seguridad.
Quiero contarte como conseguías que temblara mi
cuerpo cada vez que hacíamos el amor, o como cobraba vida mi piel cuando me
besabas.
Intentaré expresarte porqué a tu lado me sentía la persona más feliz
de este jodido mundo cada vez que soñábamos con un futuro juntos… con nuestro
futuro! Quiero hacerte entender lo fácil que era enamorarme de tus virtudes,
pero más que nada, de tus defectos, porque eran sólo tuyos, te hacían único y
especial.
De verdad que te sentía
mío; mío cada mañana, siempre tenías un motivo para despertarme con una
sonrisa. Mío cada tarde, por lo que tantas veces deseaba que pasarán las horas
para poder abrazarte y decirte “Hoy te he extrañado”. Mío cada noche, por las
cuales aquella niña ilusionada se vestía y se desvestía unas diez veces para
estar perfecta para ti, aunque fueran dos minutos, puesto que al verte aquella
insignificante ropa (que no hacía más que separar tu cuerpo del mío) acababa en
el suelo a golpe de pasión. La cuestión es, que eras mío, eras mi ilusión, mis
sueños, mis ganas, mi esperanza…
¿Qué digo? ERAS TODO. Y tenías que ser para
siempre, deseaba que fuera así…
Y ahora, aquí sentada e
intentando desprenderme de todo aquello que me daba vida… Empiezo a entender
que todo aquello, cada una de las respuestas, cada uno de los sentimientos que
me hiciste experimentar, fueron únicos e irrepetibles, pues eres el gran amor
de mi vida. Fuiste el hombre con el que aprendí a soñar, con el que experimenté
la necesidad de que el día tuviera más que unas míseras 24 horas, fuiste tú
quien me enseñó a olvidar al resto del mundo, porque estábamos tú y yo, y no
necesitábamos más que eso, contigo conocí el amor.
Hoy sólo me puedes
caracterizar por mi terrible orgullo en el cual me he sumergido de un tiempo
para acá, es por eso que tengo la necesidad de explicarte los motivos de dicha
actitud, deseo que entiendas porqué aquél día gris me despedí con un “Te queria
lo suficiente, como para haber pasado el resto de mi vida a tu lado, sino me
hubieras dejado al margen”.
Es por eso, que aun en
contra de mis deseos, con el tiempo empecé a entender lo que suponía sentirse
el ser más patético e insignificante de la humanidad, conocí el mayor dolor (el
que se haya enamorado alguna vez estará de acuerdo conmigo cuando digo que el
sufrimiento por amor es el más intenso), y también conocí la mayor humillación
al ver que no eras “tan mío”…
Así que a golpe de desilusiones y decepciones,
también me enseñaste a ser fuerte y orgullosa, aprendí -con mucho esfuerzo
(aunque suene algo idiota)- a quererme un poco más a mí que a ti.
Aprendí a
dejar de lado nuestro futuro y empecé a marcarme el mío, un futuro sin ti, puesto
que al final, nunca seremos dos. Así que con el tiempo aprendí a valorarme, a
reconocer que merecía algo más que tus patéticos, aunque sinceros “lo siento”.
Y después de tanto
tiempo, encerrándome en mi burbuja en la que me negaba a decirte “adiós”, me
encontré en aquel café sacando fuerzas de donde ya no me quedaban despidiéndome
de ti.
Diciéndote que me iba para no volver, reconociendo, que ya no habría un
“hasta luego”. Porque se había acabado, porque debía desprenderme de tus besos,
de tus te quiero, de todo lo que tu eras y significabas para mí. Y dolió.
Sigue
doliendo. Y probablemente dolerá mucho tiempo, pero, hice lo correcto ¿No? Y
aunque ese pensamiento ahora mismo no sea capaz de consolarme, y aunque nos
recuerde siempre, aunque te quiera–¡mierda, te quiero!-, aunque no sienta más que
miedo al ver que empiezo una nueva etapa sin ti, aquel día me cansé de
perseguir sueños rotos…
Hazme un favor! y no olvides nunca lo feliz que me hiciste y lo mucho que te queri, con lo bueno, y con lo malo, siempre te querre
5 INOLVIDABLES FRASES DE “EL PRINCIPITO”
“Lo
pasado ha huido, lo que esperas está ausente, pero el presente es tuyo”
Puede
que una de las cosas más importantes que tenemos en nuestra vida sea vivir el
presente y estar despiertos en cada momento que se nos presenta. La vida está llena de preocupaciones,
esfuerzos continuos, un trabajo que desarrollar, mejor o peor.
Elementos
y acciones que no nos permiten tiempo de pararnos a observar nuestro alrededor
para sentir lo que tenemos.
El
no ser conscientes del gran regalo que nos supone vivir nuestra vida nos genera
una eterna preocupación por el mañana y qué ocurrirá.
Muchos
de nosotros hemos olvidado pararnos a disfrutar un poco más, reír, compartir
con los que más queremos, realizar lo que nos gusta dando igual si sirve para
algo o no.
Simplemente
nos gusta, ¿Para qué no hacerlo entonces sin más? Permitirte disfrutar del día,
desarrollar aún más las ganas por aprender, curiosear, descubrirte a ti mismo y
los que te rodean, asombrarte, enamorarte…
En
definitiva, hacer aquello que nos importa, nos interesa y abrir nuestro corazón
a disfrutar cada momento de la vida que llevamos.
Continuamente
nos estamos desplazando rápido, tanto emocional como físicamente. Cambiamos
constantemente de relaciones, tareas, trabajos, pero no nos detenemos a
preguntarnos igual de fugazmente cuando fue la última vez que lo pasamos bien.
Vivir
el presente con consciencia es posible. Inspírate con estas 5
citas de “El Principito”, uno de los más poderosos libros que siempre
nos permitirá un precioso aprendizaje y crecimiento personal:
1.
“Sólo con el corazón se puede ver bien. Lo esencial es invisible a los ojos”
2.
“Entonces te juzgarás a ti mismo,” respondió el rey. “Eso es lo más difícil. Es
mucho más difícil juzgarse a uno mismo que a los demás. Si logras juzgarte
correctamente significará que eres un verdadero sabio”
3.
“Nadie las ha domesticado ni ustedes han domesticado a nadie. Son como era el
zorro antes, que en nada se diferenciaba de otros cien mil zorros. Pero nos
convertimos en amigos y ahora es único en el mundo”
4.
“Así es,” dijo el zorro. “Para mí aún no eres nada más que un muchachito como
cientos de otros muchachos. No te necesito y tú tampoco me necesitas a mí. Para
ti soy como un zorro igual a otros miles de zorros, pero si me domesticas nos
necesitaremos. Tú serás para mí único en el mundo y yo seré único en el mundo
para ti”
5.
“A los adultos les encantan los números. Cuando les cuentas que tienes un amigo
nuevo nunca te preguntan por lo que realmente importa. Nunca te dicen ‘¿Cómo es
su voz? ¿Qué juegos prefiere? ¿Colecciona mariposas?’ En vez de eso te
preguntan ‘¿Cuántos años tiene? ¿Cuánto pesa? ¿Cuánto dinero gana su padre?’
Sólo entonces creen conocerlo”
Espero
que estas 5 hermosas citas te hayan llevado a replantearte tu momento, el aquí
y el ahora. Algo tan importante y esencial.
Enamórate de un hombre de verdad
Si algún día llegas a leer estas palabras, quiero pedirte unos minutos de tu tiempo... para tratar de explicarte.
No puedo pedirte que te enamores de un extraño, eso es absurdo; pero, quiero pedirte que, al momento de entregar tu corazón, lo hagas a sabiendas de que quien está a tu lado, es un hombre que sabrá amarte y apreciarte por la mujer que eres.
Quiero pedirte, que te enamores de un hombre de verdad; uno, que te persiga con la mirada, como un león hambriento; y que, se pierda en el brillo de tus ojos, aún en la oscuridad.
Enamórate de un hombre, para el cual tú seas la única mujer en este mundo; y, que sea capaz de construirte un castillo, aunque solo tenga un lápiz y papel.
No puedo pedirte que te enamores de un hombre que lo haga todo; sin embargo, te pido que te enamores de un hombre que esté dispuesto a hacerlo todo por ti.
Quiero que te enamores de un hombre con la suficiente hombría para cocinar por las noches, o cuándo estés cansada. Un hombre que pueda coser un botón de tu blusa favorita, para que puedas llegar a tiempo a esa reunión; y, por qué no, que te diga al oído que: todo estará bien.
Enamórate de un hombre que valore a Dios, a la familia y los amigos. Pues en la vida, necesitará de todos ellos. Y, si es un ladrón, procura que te robé solo algunos besos; pues, ya te habrá robado el corazón.
Quiero que te enamores de aquel que acaricie tu rostro y juegue con tu pelo, así sabrás que su mente está solo contigo. Cualquiera puede decir un “te amo”; pero, el amor se demuestra cada día, y en los pequeños: “te quiero”...
Quiero que te enamores de un hombre que procure llenarte de alegría; y que te haga sonreír, aún en tus días más difíciles. Enamórate de aquel hombre, que no se aproveché de ti, ni aún en tus momentos de vulnerabilidad. Un verdadero hombre te respetará, incluso, cuando tú no quieras.
Enamórate de un hombre que no haga alarde de los bienes que tiene; sino, que sepa apreciar y valorar todo aquello que ha vivido, las personas con las cuáles ha compartido y las experiencias que en la vida ha acumulado.
Enamórate de alguien a quien le guste cocinar y ejercitarse, así tendrás la excusa perfecta para comer tus caprichos; y luego, pasar el tiempo juntos: “quemando esas calorías”. Quiero que te enamores de un hombre que esté dispuesto a llevarte la contraria; y, que tenga un punto de vista distinto al tuyo. Así, en la salud, la distancia o la enfermedad, sabrás que siempre podrás contar con alguien que estará a tu lado: a pesar, de cualquier diferencia.
Enamórate de un hombre que te tenga presente a cada momento del día; y, que te llene la vida de detalles. Un hombre, que jamás te oculte lo que siente; y te diga, lo que necesitas saber. Quiero que te enamores de alguien que sepa escucharte, aún en el sórdido silencio del olvidó.
Enamórate de un hombre que sea libre, que sea tuyo; que te ame, y que se deje amar por ti. Enamórate de alguien que, aunque no sea yo, te haga feliz.
Al final, si aún no has comprendido, eres tan digna de este amor tan tuyo y tan mío, que aquél de quién te enamores sabrá, que: sólo un hombre de verdad, es digno de ti.
No te conformes con menos...
Suscribirse a:
Entradas (Atom)